El tema está basado en la canción Bad moon rising de Creedence, que fue un éxito en las décadas de 1960 y 1970.

Tal fue el furor que los miembros de la banda creadora del tema agradecieron a los hinchas argentinos haber utilizado su canción para alentar al equipo de Lionel Messi.

“Es fabuloso y un gran honor que nuestro tema se haya transformado en la canción de la victoria argentina. Muchas gracias y la mejor de las suertes”, dijo Doug ‘Cosmo’ Clifford, el batería de Credence, en diálogo con Clarín.

“Brasil decime qué se siente tener en casa a tu papá”, es el primer verso del grito de guerra argentino que canta desde el hincha más pequeño al de mayor edad sin distinción de género.

En la parada del autobús, en la verdulería, esperando cruzar la calle, en la radio y hasta arriba de un taxi se puede escuchar la canción que recuerda el triunfo argentino frente a Brasil, en los cuartos de final de Italia 90’.

Incluso la orquesta del Regimiento de Granaderos a Caballo, emblemático cuerpo militar de la Independencia, se sumó a la arenga popular y entonó con sus instrumentos lo que ya se ha convertido nuevo himno patrio.

Inevitablemente, la rivalidad futbolística que mantienen desde siempre argentinos y brasileños se extendió a las ciudades cariocas donde también resuenan

Pero la rítmica del tema de Creedence no es una novedad en Argentina porque ya se ha empleado en otras circunstancias no sólo deportivas sino también políticas.

“River decime qué se siente haber jugado en el Nacional”, se burlaban, y aún lo hacen, los fanáticos del Boca Juniors de su eterno rival, River Plate, cuando éste descendió, por primera vez en su historia, de la primera categoría del torneo local.

Además, la agrupación kirchnerista La Cámpora utiliza, en los actos oficiales los compases de “Bad Moon Rising” para asegurar que son leales al Gobierno de la presidenta Cristina Fernández.

“Yo sigo bancando (apoyando) este proyecto, proyecto nacional y popular”, corean a viva voz los militantes.

En Ipanema, Copacabana y en todas las playas de Río de Janeiro retumbarán con el canto argentino de los miles de fanáticos que acudirán, tengan entradas para el parido o no, para ver la final de su equipo contra un viejo conocido, Alemania.

Cualquiera sea el resultado, “Brasil decime qué se siente”, sobre todo después del humillante 7-1 que sufrió la selección verdeamarela, quedará grabada en la memoria de todos los argentinos.

“A Messi vas a ver, la copa nos va a traer, Maradona es más grande que Pelé”, finaliza el tema con una promesa, que cada vez parece más una premonición.