Scolari y el coordinador técnico de la selección, Carlos Alberto Parreira, tuvieron una reunión con psicólogos deportivos para que puedan ayudar a controlar los nervios de sus jugadores ahora que enfrentarán a Colombia por los cuartos de final, informaron algunos medios de Brasil.

Durante los 30 minutos del tiempo extra y en la tanda de los penales, se pudo observar a un Brasil totalmente fuera de su juego, ello debido al pánico escénico que les produjo el pensamiento de perder el partido.

El arquero Julio César estaba llorando antes de la definición y el capitán, el defensa Thiago Silva, lloró durante la tanda de penales.

Durante el partido contra Chile, en especial al final de la segunda parte y en los tiempos suplementarios, algunos jugadores eran un auténtico manojo de nervios y no estuvieron a su nivel por miedo a perder el partido, según reconoció Scolari.

Scolari afirmó que se tratará de influir en los jugadores para que pese más la razón y menos la emoción, según publicaron diarios como Folha de São Paulo, Estado de São Paulo y O Globo, sin usar citas textuales de Scolari. El trabajo de control emocional corre a cargo de la psicóloga Regina Brandão, quien trazó el perfil sicológico de los 23 jugadores al inicio de la concentración en Teresópolis, a finales de mayo.

En un principio, se enfatizarán los factores positivos, mostrando que el equipo ya ha hecho méritos y ha pasado lo peor, evitando una eliminación del Mundial a las primeras de cambio.