Saben cuál fue la mayor asistencia al coloso del José Díaz en toda su historia. Fue en 1959, cuando la selección peruana enfrentó a su similar de Inglaterra con una asistencia de 50, 306 espectadores. El partido acabó 4-1 a favor de Perú.

Sabían que las viejas tribunas de madera del Estadio Nacional fueron a parar al estadio Lolo Fernández de Breña. Que le dicen el “Coloso del José Díaz” porque así se llama la calle colindante al estadio. Que su primer nombre fue “Stadium Nacional”, pues las tribunas fueron donadas por el gobierno británico. Es más, antes estaba ubicada en lo que hoy es el Parque de la Reserva.

Pero no todo lo que pasó dentro del estadio es de grato recuerdo (más allá de las derrotas). El 24 de mayo de 1964 se jugó en un Estadio Nacional repleto, la asistencia oficial fue de 47.197 espectadores, un partido entre las selecciones de Perú y Argentina. El ganador clasificaba a los Juegos Olímpicos de Tokio.

La visita ganado 1-0 y a poco del final, Perú marcó el empate. El juez anuló el gol lo que provocó la furia de los asistentes. La policía, grave error, arrojó bombas lacrimógenas a las tribunas y se armó tremendo alboroto, hecho que se agravó cuando las personas al huir de las bombas se encontró con las puertas del estadio cerradas. Resultado: 328 muertos, muchos de ellos pisoteados y asfixiados. Es la mayor tragedia en un estadio de fútbol.

En el 2005 se le instaló gramado artificial como requisito para organizar el Mundial Sub 17, hecho que causó las críticas de todos los sectores especializados y de la opinión pública en general.

Sin embargo, el 24 de julio del 2011 se reinauguró el estadio Nacional, con césped natural, con remozadas tribunas y con imponentes palcos.

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