Es así, que decenas de trabajadores libran una batalla contrarreloj para terminar la ampliación del Estadio Nacional, que será reinaugurado este domingo con un partido amistoso entre las selecciones Sub-20 de Perú y de España.

El estadio contará con capacidad para más de 55.000 aficionados, 317 palcos, nueva iluminación y césped natural en reemplazo de la cancha sintética colocada en 2007 a sugerencia de la FIFA para un mundial Sub-17.

Una de las novedades en seguridad que tendrá el estadio es un lector de huella digital en cada puerta, donde cada espectador deberá colocar su mano para entrar. Ese escáner toma las huellas de cuatro dedos y procesa los datos en segundos con un software que realiza la búsqueda de antecedentes del espectador.

En la tribuna de occidente no habrá malla de seguridad; en oriente será corta. En las norte y sur, donde se colocan las barras bravas de los clubes más populares, habrá doble malla.

En las tribunas de detrás del arco, habrá dos pantallas gigantes de televisión. La nueva fachada luce un diseño con planchas de aluminio, con un sistema de iluminación decorativa, alejada de la tradicional estructura de cemento.

En la reinauguración, el estadio solo tendrá aforo para 30.000 espectadores, según el estatal Instituto Peruano del Deporte (IPD ), administrador del recinto, pues las obras de remodelación no están completas.

Fuente: AFP

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