Real Madrid derrotó al Basilea a domicilio y sumó puntaje perfecto en sus cinco partidos del grupo B de la Liga de Campeones.

Si hay un futbolista que no admite jugar a un ritmo menor es Cristiano Ronaldo, quien anotó el tanto triunfal a los 35 del primer tiempo, menos aún teniendo a tiro el récord goleador de Raúl y tras ver como el argentino Lionel Messi era el primero en superarlo. Comenzó picado con un manotazo en la cara sin castigo del colegiado y se vengó como mejor sabe hacerlo.

Le costó al Real Madrid encontrar el camino del peligro. El buen posicionamiento del Basilea también lo impidió, pero hasta en los días de menos brillo la intención madridista pasa por tener el balón. Nunca reculó metros y tuvo paciencia hasta encontrar el premio. Su primer remate llegó al cuarto de hora, de cabeza blando de Bale. Cinco después Cristiano calentaba con un potente disparo sin colocación, al cuerpo de Vaclik que detuvo en dos tiempos.

En la portería madridista también hubo rotación de Ancelotti. Keylor Navas debutó en Liga de Campeones viendo como los primeros intentos del conjunto suizo acababan en disparos que no encontraban el arco. Elmeni chutó arriba, Zuffi lejano desviado.