Pero lo cierto es que en esta ocasión, el trabajo del paraguayo Enrique Cáceres fue correcto y su decisión contribuyó en un resultado justo, aunque esto genere desazón en todos los peruanos, ya que el gol Yordy Reyna fue bien anulado.

Según se aprecia en todas las imágenes, hubo posición adelantada al momento de ejecutarse el tiro libre, con lo que la jugada quedó correctamente invalidada pese a los innumerables reclamos de los jugadores de la Sub 20.

Lo único que se le podría reclamar a Enrique Cáceres es que en la primera etapa paró mucho el choque y benefició a Chile en jugadas divididas, pero ninguna de ellas decisivas en el resultado del juego.

Es cierto que las injusticias arbitrales muchas veces nos perjudicaron, pero este domingo la justicia evitó que el sueño peruano de llegar al Mundial de Turquía se haga realidad y apagó de golpe el grito de gol de millones de compatriotas.