Son jóvenes y este tipo de actitudes deben ser corregidos desde ahora. El jugador colombiano agredió al golero argentino al intentar alcanzar un balón aéreo dentro del área.

No era necesaria tanta violencia para llegar al balón. Había presión en los colombianos: Perdían 3-2 y ello los eliminaba del torneo, pero ello no justifica esta acción. Pudo terminar peor de lo que fue.