Jugar un mundial con un promedio de edad de 20 años es todo un privilegio, más aun cuando terminas siendo uno de los jugadores más resaltantes de tu equipo o del certamen.

Es el caso de muchos de los jugadores que se pusieron a su equipo en sus hombros. Casos como el de James Rodríguez en Colombia, Joel Campbell en Costa Rica y Neymar en Brasil son los más destacados de sus respectivos equipos.

Para algunos ni ganar el título mundial con Alemania en Brasil 2014 les sirvió para poder postular al máximo galardón de la FIFA. Recordemos que la ‘Mannschaft’ fue toda una máquina y gran parte de los miembros del equipo cumplió una estupenda Copa del Mundo.

Por último, las lesiones y su falta de continuidad por alguna sanción o decisión técnica son factores que también les cobraron caro, pese a que siempre que están en la cancha muestran un excelente nivel.

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