Aymeric Laporte no se moverá del Athletic Club de Bilbao en el verano de 2015, salvo si llega el Manchester United y paga los más de 36 millones de euros que estipula en su cláusula de rescisión. El jugador vasco francés renovó hace bien poco su contrato porque está feliz y porque no tiene ninguna prisa por abandonar la entidad de su vida.

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Muchos periodistas deportivos hablaban de lo que se conoce como “renoventa”, renovar a un jugador para luego venderlo por un precio más alto. El caso del Athletic Club Bilbao y las cláusulas de rescisión es de los más habituales ya que únicamente venden de esa forma a sus jugadores más valorados.

No sólo el Manchester United ha preguntado por Aymeric Laporte. El FC Barcelona también lo tenía en su lista de futuribles, pero la renovación del central y lo complicado de negociar con el Athletic, lo dieron por perdido. Ahora, además, siguen sin poder negociar con nadie hasta enero de 2016 por la sanción impuesta por la FIFA.

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