Primero, se observa a un José Mourinho en el vestuario nervioso por lo cerca que se ha puesto el Barcelona en la tabla. También, a un Cristiano Ronaldo preocupado por su aspecto físico y asustado por la aparición de un Lionel Messi.

El portugués luce nervioso y asustado. Ve por todos lados a Messi y no sabe qué hacer para que desaparezca. El argentino lo cita para encontrarse en el Camp Nou y hasta en una posible final de Liga de Campeones en Múnich.