La Copa Suruga Bank enfrentó al campeón de la Copa de Japón y la Copa Sudamericana, en un encuentro en el que el Kashima Antler se vio arriba en el marcador por 2-0, pero luego permitió que la Universidad de Chile igualara.

A pesar de que en el primer tiempo los japoneses dieron la sorpresa con un fútbol rápido y alegre que descolocó a los chilenos, la segunda parte contó con el dominio abrumador de la “U”, que mereció, por ocasiones, llevarse el título en el tiempo reglamentario y le faltó algo de suerte en el remate.

El Kaswima alcanzó el primer gol tras una falta perfectamente colgada por Ogasawara desde el vértice del área derecha de la puerta de Herrera fue rematada a gol, sin apenas oposición, por el defensa Iwamasa en el minuto 17, adelantando al conjunto japonés.

Las altas temperaturas y la colorida hinchada japonesa animaron el encuentro y en el minuto 26, el brasileño Renato culminó un contragolpe del equipo japonés con un certero disparo desde la frontal y ante la pasividad de los defensores del conjunto chileno.

En su empuje, y a falta de cinco minutos para el final del primer tiempo, Mena puso un centro desde la banda izquierda que remató a gol, en propia puerta, Iwamasa, autor también del primer tanto de su equipo, para poner la emoción de cara a la segunda parte.

En la reanudación, la ‘U’ buscó el tanto del empate, con toque, claridad y profundidad, se hizo con el control absoluto y gozó de numerosas ocasiones. Hasta que en el minuto 70, la enésima internada por banda de Marino terminó en un penalti que transformó Aránguiz, tras un lanzamiento imparable muy ajustado al palo de Sogahata.

Finalmente, el calor hizo mella en los dos equipos y el partido terminó con el empate que dejó paso a la tanda de penales, tal y como pasó en las últimas dos ediciones de la Copa. Desde los 11 metros, y tras una serie de infarto en la que nadie fallaba, el Kashima se llevó el título y otorgó, por tercera ocasión, la copa a un equipo japonés.

Foto: Agencia AFP

EFE