Se jugaba el primer tiempo suplementario y el cuadro español dispuso un contragolpe con su mejor hombre de cara al gol, sin embargo, por esta ocasión la fortuna no estuvo de su lado.

Carlos Bacca estuvo frente a frente con el portero del Benfica, pero de forma increíble mandó el balón completamente desviado.

Benfica y Sevilla llegaron a los tiempos suplementarios luego de haber igualado a cero en el tiempo regular de la gran final de la Europa League que se disputó en el Juventus Stadium de la ciudad de Turín.

La escuadra portuguesa acaba de proclamarse campeona en la liga portuguesa y disputa su segunda final consecutiva luego de haber perdido en la del año pasado ante el Chelsea de Inglaterra.

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