El Real Madrid cerró con sabor amargo 2017, el mejor año de su historia, en el que conquistó cinco títulos con gestas que hasta la fecha nadie había conseguido, como reeditar éxito en la Champions League y Mundial de Clubes, que suma al título de Liga más las supercopas de Europa y España.
La felicidad de los cinco títulos conseguidos en un año contrasta con la desilusión de verse alejado de la posibilidad de luchar por un sextete en una temporada. La dura derrota del clásico (0-3) deja al Real Madrid a catorce puntos, con un partido menos, del Barcelona, una distancia que jamás se remontó en la historia de la Liga.
La irregularidad del presente choca con la fiabilidad de un Real Madrid que marcó en todos los partidos de la pasada campaña (60) y ahora no lo ha conseguido en cuatro de 29 encuentros. El último, sin pegada ante el Barcelona para resucitar la Liga.
Por ello Florentino Pérez ya está evaluando a los posibles refuerzos con lo que planea cerrar de mejor manera posible la temporada.
Llegaría de todas manera un centrodelantero ante la inoperancia de Karin Benzema. Los argentinos Mauro Icardi y Sergio Agüero son las alternativas pese a que ambos tienen con sus actuales equipos cláusulas de rescisión muy altas.
En tanto, si bien Kaylor Navas, ha dado la talla, se buscaría un nuevo suplente que lo exija más, por ello el golero Kepa del Athletic Club de Bilbao podría vestirse de blanco en 2018.
