Uno a uno fueron pasando los jugadores madridistas para recibir el trofeo que los acreditaba como nuevos campeones de Europa. La emoción y la alegría era desbordante.

El presidente de la UEFA, Michel Platini, fue quien entregó la conocida ‘Orejona’ al capitán Iker Casillas, que no dudó en alzarla y desatar la euforia de todos los hinchas del Real Madrid presentes en el imponente estadio Da Luz de la ciudad de Lisboa.

Los jugadores fueron pasándose la copa mientras una lluvia de papelitos se encargaba de engalanar el inolvidable momento ante la vista y aplausos de miles de seguidores madrileños.

De esta manera, el Real Madrid lograba conquistar por décima vez la UEFA Champions League y frustró los sueños del Atlético de Madrid por obtenerla por primera vez en su historia.