El brasileño ha dejado de ser intocable en el . Después de dos suplencias y ausencia de minutos en dos encuentros de LaLiga Santander que marcarían el rumbo en lo que resta de temporada, ante Real Betis y Sevilla, recibió de un gesto de respeto junto a un toque de atención.

Tres lesiones han impedido adquirir el tono físico deseado a Marcelo en el presente curso. De su último percance muscular reapareció el 12 de diciembre, en ante el CSKA, para ganar ritmo para un Mundial de Clubes que disputó completo. Su regreso de vacaciones no fue el esperado por el cuerpo técnico.

El lateral brasileño es uno de los jugadores que más le cuesta recuperar el tono tras los parones. Enero comenzó con partidos en los que su mala preparación fue evidente y quedó demostrado en el estadio de la Cerámica, en el empate ante el Villarreal, y tres días después en la derrota frente a la Real Sociedad en el Santiago Bernabéu.

“Su estado físico no es óptimo. Teníamos que aprovechar esa baza”, llega a admitir públicamente Imanol Alguacil, técnico de la Real Sociedad.

La reacción de Santiago Solari llegó en Sevilla, en un encuentro que encaraba con ocho bajas y en el que no le tembló el pulso para sentar en el banquillo a Marcelo y apostar por el joven Sergio Reguilón. Repitió en el encuentro por la tercera plaza frente al Sevilla en el Bernabéu. Ningún minuto para un jugador que hasta la fecha siempre fue intocable.