En los entrenamientos del Real Madrid, previo al duelo de ida por los octavos de final de la Champions League frente al AS Roma, el portugués Cristiano Ronaldo intentó tirarle un caño a Zinedine Zidane, pero el delantero no contó con la astucia del francés.
Zinedine Zidane supo las intenciones de Cristiano Ronaldo y no le permitió lucirse. Al final el astro del Real Madrid se dio media vuelta y continuó entrenando con el resto de sus compañeros.
El menú de trabajo del Real Madrid consistió en ejercicios de posesión de balón y toque, un circuito físico de carrera de velocidad, ensayo de puntería con disparos a puerta y un partido final en un campo de reducidas dimensiones. Pero las miradas estaban en Cristiano Ronaldo y Zinedine Zidane.