Los dirigidos por el ‘Cholo’ Simeone , jugaron con el corazón en la mano, y lograron combatir las arremetidas merengues. Todo ello hizo que CR7 se frustara y se dedicara a cometer faltas infantiles, y en más de una ocasión se salvó de ver la tarjeta roja directa.

Cristiano vio la amarilla por quejarse ante un supuesto mal saque lateral, lo que el árbitro no aguantó y le mostró la amonestación. El portugués ya jugaba en el filo de poder irse al vestuario. Corría el minuto 110 del tiempo extra cuando un choque con el ‘Colchonero’ Gabi hizo que Ronaldo cayera y estirara la pierna conectando en el rostro del capitán del ‘Aleti’. Inmediatamente toda la banca del Atlético de Madrid saltó para reclamar dicha agresión por lo que el árbitro del partido no dudó en sacarle la tarjeta roja. Hubo un conato de pelea entre Simeone y Pepe, pero que no llegó a más.