El entrenador del Barcelona de España, Luis Enrique, explotó de cólera tras la derrota que sufrió el conjunto azulgrana ante el Celta de Vigo por la décima fecha de la Liga Española en su casa, el Camp Nou, con lo que perdió la punta a manos de su clásico rival, el Real Madrid.

“Estoy cabreado por no haber materializado un partido que nos hubiera ido bien ganar, pero forma parte del proceso y de la temporada”, ha señalado Luis Enrique, quien ha negado estar preocupado después de sumar dos derrotas consecutivas y perder el liderato.

“Yo firmaría tener un partido con tantas ocasiones como este, pero no firmaría no ser tan efectivo”, ha puntualizado el asturiano, quien ha elogiado la actitud de su plantel que ha luchado “hasta el final” para conseguir la victoria.

Finalmente, habló acerca de las críticas que recibe el equipo azulgrana desde la derrota en el clásico ante el Madrid: “Es muy fácil mutilarnos y sacrificarnos de que todo estaba hecho. Si no controlamos el juego sufrimos por el perfil de jugadores que tenemos”.

EFE