El escándalo que protagonizaron los jugadores de las selecciones de Serbia y Albania en el encuentro en el que se enfrentaron por el grupo I de las eliminatorias a la Eurocopa Francia 2016 todavía sigue generando noticia.

Esta vez, y en un hecho insólito, los jugadores albaneses fueron revisados por la policía serbia en busca del control remoto del dron que generó todo el caos.

Recordemos que durante el encuentro, dicho aparato manejado por control remoto sobrevoló el terreno de juego con una bandera de la Gran Albania, un concepto irredentista que incluye regiones de Montenegro, Grecia, Macedonia y Serbia.

Fue en ese momento que el serbio Stefan Mitrovic recogió la bandera para bajar el aparato, por lo que fue empujado por varios jugadores albaneses y se organizó una trifulca sobre el campo que tuvo que ser dispersada. El árbitro tuvo que suspender el partido.

El volante albanés Sokol Cikalleshi dijo luego del lamentable suceso: “Temimos por nuestras vidas. No queríamos que los jugadores serbios arrojen nuestra bandera y ahí comenzó todo”, explicó.

“No nos sentíamos seguros. No nos sentimos seguros hasta que entramos a los camerinos. Cuatro jugadores fueron heridos durante el hecho y no queríamos continuar así”.

“Inmediatamente después del partido fuimos escoltados por la policía al aeropuerto y partimos a Tirana (capital albanesa)”.