Se jugaba el minuto 26 del primer tiempo el último miércoles 30 de diciembre del 2015 entre el y , cuando sucedió lo peor para el equipo del peruano .

Mandaron un pase largo a Lionel Messi, pero el portero Adán salió a cortar el balón con los puños y sin querer se topó con él, quien cayó al suelo golpeado.

En seguida el juez cobró un penal que nunca debió ser, le sacó tarjeta amarilla al golero y sentenció el destino del conjunto sevillano.

“El partido lo teníamos controlado. En 30 minutos no había pasado nada, transcurría bien. He jugado de delantero toda mi vida. Ojalá me hubieran pitado un penal porque el portero saca los puños”, criticó el DT de Juan Vargas tras el encuentro.

Finalmente, el Comité de Competición de la Liga decidió que se le quite la sanción a Adán, pues consideró “derribó a un contrario en la disputa del balón” y no por una jugada desleal.

De esta forma el Real Betis obtiene la razón, pero nadie le quitará ya los puntos perdidos ante el Barcelona.