El exjugador argentino considera que el aspecto emocional puede ser decisivo en el desenlace de la final de la Copa Libertadores, cuyo partido de vuelta se disputará dentro de una semana en el estadio Monumental de Buenos Aires.

Verón, jugador de durante una temporada (1996), afirmó que, después del empate a dos goles en La Bombonera, “obviamente” es un partido “en el que puede pasar cualquier cosa”.

“Puede pasar cualquier cosa. Es un partido distinto a cualquier otra final, porque son dos rivales, uno de los clásicos más grandes de Sudamérica y, obviamente, no es un partido más. Es un encuentro en el que va entrar mucho lo emocional. Ojalá, que salga un gran partido”, indicó.

Sebastián Verón hizo estas declaraciones en el marco de Soccerex, la exposición de la industria del fútbol que se celebra en Miami el 15 y 16 de noviembre, a la que ha acudido como presidente del club Estudiantes de la Plata.

El excentrocampista, internacional en 73 ocasiones con la Albiceleste, considera que la selección argentina “necesita tiempo” para recuperar el crédito perdido en el Mundial de Rusia.