La última de José Mourinho. El entrenador del Chelsea inglés se metió a la cancha en un partido de Soccer Aid 2014 y le cometió falta a uno de los futbolistas.

Todos se quedaron perplejos, nadie lo podía creer. Mourinho saltó al campo de juego y se tumbó a uno de los jugadores que tenía el balón en su poder. El agredido tampoco lo podía creer y solo atinó a reírse. ¿Qué más podía hacer?

Por cierto, el público estalló y celebró la acción del siempre polémico técnico del Chelsea que suma un nuevo episodio a su ya cargada historia como protagonistas de hechos saltantes, aunque más lo era por sus declaraciones.

Por cierto, no hubo necesidad de expulsar a también exentrenador del Real Madrid, él se fue por sus propios medios, también con una amplia sonrisa en sus labios, cual niño travieso que logró su cometido. Un genio.