Sólo en un par de contadas acciones individuales pudo ponerse Inglaterra por delante en el marcador, pero no estuvo entonces entonado Wayne Rooney en el remate final.

Tras las dos ocasiones de Rooney, el partido se tornó aún más monótono y sólo despertó en el minuto 35, en acción por la izquierda de Leighton Baines cuyo centro no acertó a matar Danny Welbeck.

La segunda mitad se inició con una Estonia que reforzó aún más su contención con la salida al campo de Lindpere, pero sobretodo con la expulsión de Ragnar Klavan que desnivelaba ya la contienda del lado visitante.

Pero Inglaterra seguía sin ideas, sin capacidad para romper una contención cada vez más firme local y abusando de balones largos que eran bien resueltos por Estonia. Roy Hodgson intentó dar más fluidez y velocidad a su equipo, con las salidas de Alex Oxlade-Chamberlain y del rápido Raheem Sterling y la misión de abrir el juego más por bandas.

Mejoró Inglaterra, pese a que tampoco su juego maravilló ni trajo claras ocasiones de gol. Pero, en una falta al borde del área, llegó el “salvador” Rooney, quien puso el balón lejos del alcance de Sergei Pareiko que lo llegó a tocar pero poco más.

El 0-1 daba oxígeno a Inglaterra,que pasó a controlar y casi dejar ir los minutos ante una Estonia combativa pero muy roma y escasa en ataque, y que apenas hizo intervenir a Joe Hart.

Eso sí, casi al final, pudo llegar el segundo tanto de Rooney, que se escapó del defensa, se plantó sólo ante Pareiko pero no supo eludir la buena salida del meta estonio.

Inglaterra se llevaba los tres puntos y suma por triunfos sus tres partidos jugados, sin encajar gol alguno; Rooney se acerca a Bobby Charlton; y Estonia se queda con el regusto de saber que hubiera acontecido sin la expulsión de Klavan.

- Ficha técnica:

0 – Estonia: Pareiko; Jaager, Morozov, Klavan, Pikk; Mets; Antonov, Vassiljev (Lindpere, m.46), Vunk (Kluglov, m.83), Zenjov (Ojamma, m.80); Henri Anier.

1 – Inglaterra: Hart; Chambers, Cahill, Jagielka, Baines; Wilshere; Henderson (Sterling, m.64), Lallana, Delph (Oxlade-Chamberlein, m.61); Welbeck (Lambert, m.80), Rooney.

Gol: 0-1. Min.74: Rooney, en saque directo de falta.

Árbitro: Marijo Strahonja.

Estadio: A. Le Coq Arena, Tallin.