Tras recibir amenazas de la FIFA de excluirlos de la justa mundial, las obras del estadio de Sao Paulo para el Mundial de fútbol de 2014 comenzaron este lunes.

Tres tractores de la constructora Odebrecht iniciaron los trabajos de apisonado del terreno de propiedad del club Corinthians ubicado en Itaquera, un barrio popular en el extrarradio de la mayor ciudad de Brasil.

El presidente del Corinthians, André Sánchez, se comprometió a “no descansar” hasta concluir el proyecto, que describió como “complejo, enorme y con muchas dificultades”, según un comunicado.

El inicio de las obras se da dos días después de que el ministro brasileño del Deporte, Orlando Silva, le diese un ultimátum a la ciudad de Sao Paulo para demostrar que tiene capacidad de organizar el Mundial.