Molesto por el accionar de su equipo, el DT del Sporting Lisboa, Frankie Vercauteren, hizo rebotar fuertemente el balón contra el piso, pero no midió la fuerza y la pelota, como es obvio volvió también con fuerza pero a la cara del técnico.

Pero su molestia tuvo fundamente, su equipo cayó 2-1 en su visita al Genk belga y casi ya se despide del a Liga de Europa en la fase de grupos.