Todo el mundo vio en imágenes de la televisión y fotografías que se viralizaron en redes sociales la forma como Cristiano Ronaldo vivió a mil por hora el partido entre Portugal y Francia desde el banquillo.
Se paraba a cada rato, iba hasta la zona técnica y hasta se ponía a dar instrucciones a sus compañeros en compañía de Fernando Santos; sin embargo, pocos se dieron cuenta del curioso festejo que tuvo el delantero del Real Madrid con su entrenador.
En un momento Cristiano Ronaldo, invadido por la euforia, cogió a Santos y lo sacudió de una lado a otro sin que este pudiera hacer nada.
El experimentado estratega, quien se mostró muy serio hasta el final del partido, no le respondió a su capitán y siguió mentalizado en el encuentro pensando en cómo defender la diferencia que habían conseguido con el gol de Eder en el tiempo suplementario.