Economista de formación y miembro de una familia siempre ligada al fútbol, se convirtió este martes en el tercer paraguayo en presidir la , donde los casos de salpican a dos de sus antecesores, Juan Ángel Napout, preso en Estados Unidos, y Nicolás Leoz, en arresto domiciliario.

Alejandro Domínguez, de 44 años, fue elegido de manera unánime, con el apoyo de las diez federaciones de la Conmebol, durante el congreso extraordinario celebrado en la sede del organismo, en el Gran Asunción.

Alejandro Domínguez siguió los pasos de su padre en la entidad deportiva e integró el directorio de Olimpia entre 1995 y 1996, para ser después su vicepresidente entre 2004 y 2006.

Su experiencia en Olimpia le catapultó un año después al rango de vicepresidente primero de la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF), entonces presidida por Napout, con quien le une una amistad que nunca ha negado, ni siquiera cuando este fue encarcelado en Suiza.

En 2014, el paraguayo fue electo presidente de la APF, después de que Napout asumiera como máximo representante de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).

Domínguez recibió entonces 125 votos a favor de su designación como presidente de la APF, de un total de 137, una cifra considerada un récord de participación en los 108 años de historia de la entidad.

Antes de ocupar este puesto, Alejandro Domínguez obtuvo una amplia experiencia en el ámbito empresarial, convirtiéndose en propietario del grupo de comunicaciones La Nación, conformado por periódicos y emisoras de radio, y que en 2015 fue adquirido por Sarah Cartes, hermana del actual presidente paraguayo, Horacio Cartes.

Además de su vinculación al panorama mediático, el nuevo líder del fútbol sudamericano tiene intereses en empresas tabacaleras, hoteleras e inmobiliarias y es miembro fundador de una fundación de ayuda para personas con autismo.