Diego Simeone, entrenador del Atlético de Madrid, no quiso opinar sobre la actuación del árbitro aragonés Jaime Latre, que le anuló tres goles a su equipo frente al Athletic Club y dijo que, sobre todo, le queda “la tranquilidad” de que su equipo “sigue compitiendo”.

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“No opino porque el resultado no cambia”, dijo Simeone en rueda de prensa, sobre los dos goles anulados al francés Antoine Griezmann y el invalidado al portugués Tiago Mendes, en un encuentro que concluyó con empate a cero.

El entrenador, que esquivó cualquier polémica, destacó cómo su equipo supo reaccionar tras 20 primeros minutos malos y se hizo merecedor de la victoria.

“En el primer tiempo, tuvimos un pasaje que no fue bueno hasta el minuto 20. Luego, el juego fue parejo, con situaciones favorables para ambos. En el segundo tiempo, jugamos bien, con mucho coraje y debimos haber ganado el partido, pero nos quedamos con el empate”, señaló.

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