“El peruano Paolo Guerrero todavía debe tener la rodilla en la mano”, señaló Sebastián Abreu, en referencia a la vehemencia con la que su compañero encara los partidos, aunque en general se le reconoce que no tiene mala intención y rara vez sea expulsado.

Según el ariete charrúa, el que Diego Lugano haya recibido el premio Fair Play fue como “concederle el Premio de la Paz a Bin Laden”.

Abreu tomó el micrófono, como lo ha hecho en otras ocasiones, y recordó que “el 16 de julio se honró a la historia ganándole a Argentina” en el aniversario del “maracanazo”, la hazaña de 1950 cuando Uruguay le arrebató el título mundial a Brasil en Rio de Janeiro al ganarle la final por 2-1.