El máximo directivo del fútbol mundial, , se encuentra en Buenos Aires para conocer con detalle la candidatura conjunta que preparan Argentina, Uruguay y Paraguay para organizar la Copa del Mundo de 2030.

“No es solo el honor y el placer de estar aquí en Argentina, sino también la emoción de estar en un país que tiene una ciudad que escribió muchísimas de las páginas más emocionantes no de la historia del fútbol, sino de la leyenda y el mito del fútbol. Gracias a Argentina el fútbol hoy es lo que es”, dijo Gianni Infantino.

El máximo dirigente de la arribó esta madrugada y recorrió las instalaciones que tiene la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) en Buenos Aires junto al presidente de ese organismo, Claudio Tapia, y el presidente de la Conmebol, el paraguayo Alejandro Domínguez.

Luego dijo ante los medios que “Argentina desafortunadamente desde el punto de vista administrativo la pasó un poquito mal, como otros y como la FIFA”, pero que “hay fuerza y pasión para trabajar otra vez en serio por el desarrollo del fútbol”.

“Argentina debe ser un ejemplo no solo con los jugadores que juegan, como (Lionel) Messi y todos sus compañeros, sino también con lo que se hace en la Liga, en los clubes, con los aficionados, con los árbitros, las mujeres y la Federación. La Argentina debe ser un ejemplo”, añadió.

El directivo, que no respondió preguntas, también sostuvo que el país “puede hacer mucho por el fútbol mundial” y aseguró que la FIFA necesita una “AFA con gente que quiera trabajar en serio por este deporte”, el que calificó como “el más magnífico del mundo”.

En la disertación estuvieron presentes los directivos de la AFA y de los principales clubes del país y campeones del mundo con Argentina en los Mundiales de Argentina 1978 y México 1986.

Gianni Infantino, que esta misma tarde regresará a Suiza, visitó Uruguay, Paraguay, Bolivia y Colombia en marzo de 2016, poco después de ser elegido presidente de la FIFA, pero dejó fuera de la gira por Sudamérica a Argentina.

En 2030 se cumple el centenario de la primera Copa del Mundo de la FIFA, cuya final se disputó en Montevideo con victoria de la selección uruguaya por 4-2 frente a la Albiceleste.