La Copa Sudamericana trajo un resultado realmente sorprendente. Boca Juniors, jugando en la Bombonera, cayó el miércoles ante el joven club paraguayo Deportivo Capiatá, para colmo de males con un autogol Lisandro Magallán.

No fue la jornada deseada para el laureado y mundialmente conocido club argentino ante un equipo guaraní que tiene seis años de existencia y casi nula participación internacional.

La derrota boquense, por la ida de los octavos de final de la Copa Sudamericana, caló hondo en el fútbol argentino y los hinchas rivales no perdieron el tiempo y lanzaron sus memes de burla.

Nadie en la Bombonera podía creer lo que veían. Ahora, tendrá la obligación de buscar una victoria en el partido de vuelta a jugarse en próximo jueves 23 de octubre en Paraguay por un lugar en los cuartos de final.