Los monarcas de América no esperaron un planteamiento como el que propuso el Nacional, que en base a orden pudo frenar cada uno de sus intentos ofensivos.

Ni la magia de Ronaldinho Gaucho fue suficiente para encaminar a un Atlético Mineiro demasiado gris y predecible, más aún cuando pasaban los minutos y se fue dejando ganar por la presión.

Para el Nacional de Paraguay fue un buen resultado el conseguido en Belo Horizonte, el mismo que lo ayuda a seguir aspirando a clasificar a la instancia de octavos de final de esta Copa Libertadores de América.