La selección brasileña comenzó los entrenamientos preparatorios para la Copa América en la sede de la Confederación Brasileña de Fútbol en la ciudad de Teresópolis, en la sierra de Río de Janeiro.

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El entrenador brasileño, Dunga, inicialmente solo había programado una sesión de entrenamientos para esta primera jornada, pero a última hora cambió de opinión e hizo trabajar a sus jugadores en una doble tanda.

Por la mañana los jugadores trabajaron en el gimnasio y corrieron durante poco más de media hora alrededor de los campos de fútbol de la Granja Comary, el cuartel general de la Canarinha.

Los únicos que tocaron el balón en la primera práctica fueron los porteros Jefferson, Neto y Marcelo Grohe.

Antes de su viaje a Chile, la selección brasileña jugará dos amistosos, contra México el próximo domingo en Sao Paulo y contra Honduras en Porto Alegre tres días después.

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