No es un secreto que la cena navideña es uno de los momentos más esperados de diciembre, pero también es cierto que si se combinan mal los alimentos, te dejará una indigestión como ‘mejor’ recuerdo.

No comer un día antes de para ‘guardar espacio’ no es una buena alternativa pues podría generar desórdenes alimenticios que perjudican la salud.

La nutricionista D’ Janira Paucar, nutricionista del Programa Nacional “A Comer Pescado” del Ministerio de la Producción, hace énfasis en que el desayuno que tomes el 24 de diciembre puede marcar la diferencia.

La experta recomienda a las personas no ayunar ese día y respetar la hora de su y almuerzo, pero de manera balanceada.

“La alimentación debe ser mucho más ligera que los días anteriores, con bebidas naturales, abundante ensalada, porciones moderadas de alimentos fuente de carbohidratos y alguna proteína como el pescado”, señala.

Ella te deja estas recomendaciones para el desayuno, media mañana y almuerzo de tu 24 de diciembre, así esperarás la cena de Navidad de la mejor manera.

1. Antes de tomar desayuno, bebe un vaso de agua. Te ayudará a eliminar las toxinas.

2. Tu desayuno puede contener jugos naturales bajos en azúcar, media taza de avena o yogur descremado, tostadas, entre otros.

3. A media mañana puedes optar por frutas de temporada o frutos secos. Evita las harinas.

4. El plato del almuerzo debe contener la mitad verduras, una porción mediana de carbohidratos (papa, quinua, arroz, entre otros) y una porción de proteínas (pescado).

5. Hidrátate durante el día. Toma agua y refrescos caseros bajos en azúcar, como la limonada y la chicha morada.