A la hora de bajar de peso lo primero que hacemos son dietas y full ejercicios, tratamos de evitar todas esas comidas ricas en grasas, carbohidratos y calorías y empezamos a vivir un estilo de vida sana. Sin embargo, ese entusiasmo y ganas por cambiar se van desapareciendo con el transcurrir de las horas y sobretodo cuando el hambre nos invade.

A muchos se les abre el apetito cada vez más con el transcurrir de las horas. Por eso, si por las tardes o noche el hambre es más, te damos tres trucos que debes poner en práctica para comer pero sin engordar:

Después de la comida

A veces el almuerzo no es suficiente y al poco tiempo después de esta comida podemos llegar a sentir más apetito. En vez de pecar comiendo algún snack que nos engorde, lo más recomendable es tomar una taza té de menta que ayuda a tener esa sensación de llenura.

Elige bien tu snack

Una de las cosas que muchas personas no saben hacerlo con certeza es coger un snack. En vez de inclinarnos y coger esos productos crocantes, es mejor escoger uno más saludable como almendras, guindones o pecanas. Estos alimentos ayudan a tu digestión y sobretodo no te engordan.

Duerme bien

Uno de los trucos es dormir bien y a tus horas por la noche. Además de despertarte con más energías el día siguiente, estudios han revelado que al descansar bien tienes menos ganas de estar picando entre comidas.