Tanto hombres como mujeres de cualquier edad son propensos a padecer alguna afección a la que puede aparecer por deficiencia de yodo, factores autoinmunes, tumores, defectos genéticos y procesos inflamatorios. Según la Sociedad Peruana de Endocrinología, casi el 10% de peruanos se ve afectado.

Los trastornos tiroideos que se presentan con mayor frecuencia son: hipotiroidismo (falta de hormonas tiroideas), hipertiroidismo (exceso de hormonas tiroideas) y nódulos tiroideos (tumores que pueden ser benignos o malignos).

Quienes tienen mayor riesgo de padecer algún tipo de trastorno tiroideo son: los adultos mayores, las gestantes y quienes tienen antecedentes familiares con problemas tiroideos o enfermedad inmunológica como: diabetes tipo 1 o vitíligo.

En el caso del aparece cuando la glándula tiroides no produce suficientes hormonas tiroideas y se da en personas de cualquier edad siendo más frecuente en mujeres entre 30 y 60 años y en los adultos mayores . Sus síntomas son: cansancio, fatiga, depresión, debilidad, irritabilidad, colesterol alto, aumento de peso, estreñimiento, deterioro de la memoria, uñas quebradizas, caída de cabello, piel seca, bajo rendimiento intelectual e infertilidad. De no recibir tratamiento pueden haber cardiopatías, accidentes cerebrovasculares e incluso coma.

Mientras que el , es un trastorno que se produce por la excesiva producción de hormonas tiroideas lo cual ocasiona pérdida de peso, ansiedad, ojos saltones, temblor de manos, fatiga, piel delgada y muy suave, intolerancia al calor y menstruaciones poco abundantes o ausentes, disminución del peso sin causa aparente. Si no se recibe tratamiento puede causar osteoporosis o insuficiencia cardiaca, sobre todo, en adultos mayores.

En cuanto a los nódulos tiroideos, el doctor Jaime Villena de la Sociedad Peruana de Endocrinología informó que si bien afectan al 5% de la población y en la mayoría de los casos son tumores benignos, en el 12% de estos casos puede tratarse de un tumor maligno (cáncer tiroideo).

Tratamiento adecuado

Los trastornos tiroideos no se curan, pero si se diagnostican y tratan tempranamente se puede lograr una mejor calidad de vida, es por esto que hacerse un chequeo médico constante es vital.

Rosemarie Metzger, cirujana endocrina de Cleveland Clinic Florida, se especializa en el tratamiento quirúrgico de los trastornos tiroideos, paratiroideos y de las glándulas suprarrenales. Si bien no todas las personas con un trastorno de la tiroides necesitarán cirugía, existen varios tipos de trastornos de la tiroides que se manejan mejor con el procedimiento. Esto puede incluir bocio (aumento significativo de la tiroides), nódulos (crecimientos dentro de la tiroides), enfermedad de Graves (una enfermedad autoinmune que conduce a la producción excesiva de hormona tiroidea) y cáncer de tiroides.

“Estas cirugías incluyen una incisión en un área muy visible del cuerpo. Por lo tanto, se usan varias técnicas para minimizar la visibilidad de la cicatriz”, explica la especialista. La longitud promedio de una incisión para la extirpación quirúrgica de la tiroides es de aproximadamente dos pulgadas, aunque la longitud de la incisión depende del tamaño de la tiroides.