El es la época del año en la que todos alistan sus trajes de baño, toallas y sombrillas y corren a las diferentes playas o piscinas para disfrutar un gran momento lleno de diversión pero son muy pocos los que toman en cuenta que sus ojos pueden correr peligro.

Las afecciones oculares tales como conjuntivitis, queratitis e infecciones por bacterias son muy comunes.

Según precisó Carlos Siverio Llosa, especialista de Oftálmica, Clínica de la Visión, la exposición a la radiación solar es una de las causas de catarata y pterigion o carnosidad.

Con el fin de que cuides tu , en esta nota te compartimos algunas medidas para prevenir estas patologías y disfrutar el verano sin mayores problemas.

Conjuntivitis

Es la más común de las afecciones y consiste en la inflamación de la conjuntiva, el tejido fino y transparente que cubre la parte blanca del ojo.

Las fuentes de contagio suelen ser las piscinas o el mar en un primer momento, pero se propaga fácilmente entre las personas, por lo que se recomienda utilizar gafas de natación en piscinas, lavarse las manos frecuentemente con agua tibia y jabón o utilizar un limpiador para manos con un mínimo un 60% de alcohol.

Además, evite tocarse o restregarse los ojos y no compartir artículos como toallas, sábanas, fundas de almohadas, maquillaje, cepillos cosméticos, los lentes de contacto y envases de los anteojos.

Queratitis

Se trata de una dolencia que es típica de surfistas, pero que se generaliza en estos meses por la afluencia masiva de los veraneantes a las playas. Esta consiste en la aparición de pequeñas heridas en la córnea producto del ingreso de la luz del sol reflejada en el mar.

Los síntomas son dolor, ojo rojo, lagrimeo y dificultad para abrir los ojos por intolerancia a la luz. Para prevenirla se recomienda el uso de lentes de sol con protección UV durante todo el tiempo que se permanece en la playa, así como evitar estar en el mar por tiempo prolongado.

Infección por microbios

En la mayoría de casos se da por el uso de lentes de contacto en ambientes acuáticos, los dos microbios más peligrosos son la Acanthamoeba y la Pseudomona, las cuales pueden ocasionar daños incluso irreversibles y son muy difíciles de tratar por la velocidad con la que actúan y la falta de medicamentos especializados.

Se recomienda nunca ingresar con lentes de contacto ya que el agua se acumula entre el ojo y el lente provocando un ambiente ideal para que estos organismos presentes en el agua ingresen al ojo.