“Cuando hay salud mental, cada persona puede reconocer su propio potencial, confrontar adecuadamente las situaciones diarias y trabajar de manera productiva”, expresó el psicólogo y psicoterapeuta Manuel Saravia del Instituto Guestalt de Lima.

“Para ello debemos cuidar los pensamientos, emociones y conducta que puedan afectar nuestra vida. Ponerlo como prioridad nos permitirá superar todos los inconvenientes y disfrutar de una vida mucho más placentera”, agregó.

Aquí algunos consejos prácticos para lograr este estado ideal que nos permitirá lograr estabilidad emocional:

1. Fomentar la confianza. Acepta quien eres. Conoce tanto tus habilidades como debilidades y construye, con base en ellas, una mejor versión de ti mismo.

2. Si mantienes una dieta equilibrada, acompañada de un poco de ejercicio y el descanso necesario, lograrás reducir el estrés y así disfrutarás más del día a día.

3. Fomenta las relaciones que te hagan sentir bien. La familia y los amigos son claves al momento para nutrir tus días y experiencias.

4. Recuerda que todo tipo de relación, prospera luego de que es puesta a prueba, así que acepta y brinda apoyo.

5. Mantente preparado. Piensa que los problemas financieros producen estrés, así que será mejor tener siempre un ahorro que te pueda salvar de alguna urgencia. Para que gastes menos, piensa en lo que verdaderamente necesitas y no en lo que deseas.

6. Involúcrate con tu comunidad, de esa manera podrás tener un propósito y sentir satisfacción cuando estés ayudando a los demás.

7. Autocontrol. Aprende a tener el control sobre las cosas, no dejes que el estrés te maneje. Recuerda que éste puede amenazarnos con abrumar nuestra salud mental y hasta física.

8. Aprende a hablar. No te quedes todo lo que sientes, busca compartir tus problemas con alguien más que haya pasado por una situación similar a la tuya, tal vez te pueda ayudar. De esta manera puedes encontrar una solución a las cosas y sentirte menos aislado. Buscar ayuda profesional.

9. ¡Conócete! Aprende a identificar tus estados de ánimo y trata de encontrar la mejor manera para expresarte, de modo que éstas sean constructivas, cuando quieras dejar ir alegría, tristeza, enojo, ira y miedo.

10. Mantén siempre pensamientos positivos, porque los negativos sólo absorben energía y no te sirven de mucho para tener un buen estado de salud mental. Lo mejor será que mantengas optimismo ante la vida, que conozcas lo que te hace feliz y aprendas a equilibrar y a aceptar lo que no puedes cambiar. A final de cuentas, todo se trata de ser feliz.