Aunque es cierto que el cuerpo necesita una dosis de azúcar diaria para funcionar adecuadamente. Esta debe ser obtenida a través de productos naturales, porque cuando viene de los procesados y de forma excesiva puede ocasionar obesidad, diabetes, entre otros.
Pero ¿quiere decir eso? De acuerdo con la nutricionista del Instituto Nacional de Salud (INS), Antonio Castillo, si una persona toma diariamente gaseosa o varias veces a la semana está atentando contra su salud, pues su cuerpo está recibiendo grandes e innecesarias cantidades de azúcar.
“Eso lo hará acumular calorías, lo que en algún momento derivará en sobrepeso, obesidad y hasta diabetes”, comentó a la Agencia Andina.
“Una sola botella de medio litro de gaseosa tiene entre 50 y 55 gramos de azúcar, cuando un adulto necesita 50 gramos en todo el día. Esta azúcar se convierte en caloría vacía y se acumula en el organismo, pero el exceso se acumula y aumenta el colesterol y los triglicéridos”, señaló Saby Mauricio, exdecana del Colegio de Nutricionistas del Perú.
Ambos profesionales coincidieron en señalar que lo mejor es tomar bebidas naturales, como una limonada o naranjada casera con muy poca azúcar, o consumir una fruta que aporta azúcares sin problemas.
El azúcar en sí no es mala sino la cantidad que se ingiere y eso se corrige solo con un cambio de hábito, dijo.
“Si tomamos una bebida con tres cucharaditas de azúcar debemos ir bajando esa cantidad poco a poco”, acotó por su parte Castillo.
Lo mismo sucede, agregó, si reemplazamos el azúcar por miel de abeja o panela que también es dulce. De nada sirve el reemplazo si no aminoramos la cantidad que se consume.
Consultado si en medio de toda la publicidad intensiva e insistente de dulces y golosinas dirigidos a niños, se puede evitar que éstos los consuman, el especialista del INS remarcó que lo importante es crear buenos hábitos desde pequeños para tener en el futuro adultos más saludables.
Fuente: Andina