El Gobierno del presidente estadounidense, Barack Obama, ha decidido no seguir oponiéndose en los tribunales a que la “píldora del día después” se pueda adquirir sin receta por mujeres de todas las edades, según el Departamento de Justicia.

En 2011, la secretaria de Salud, Kathleen Sebelius, estableció que las menores de 17 años necesitaban una prescripción para poder acceder al fármaco, algo que revocó el pasado abril un juez federal.

El Departamento de Justicia ha decidido no apelar esta decisión en los tribunales federales y se centrará por el momento en que se ponga en efecto la orden para que Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, en inglés) venda el anticonceptivo sin prescripción médica.

Aún así, el Gobierno de Obama podría optar por llevar el caso al Tribunal Supremo, algo que llevaría el debate sobre la contraconcepción a un nivel mucho más alto.

El Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos recomendó el año pasado que los anticonceptivos orales se vendieran sin receta en un esfuerzo por reducir el número de embarazos no deseados en el país, ya que las prescripciones pueden retrasar el acceso a la píldora y que esta no haga efecto.

Los anticonceptivos de emergencia evitan el embarazo al impedir que un óvulo fertilizado se incruste en el útero.

Están diseñados para su uso dentro de las 72 horas después del acto sexual, pero son más eficaces si se toman dentro de las primeras 24 horas.

Fuente: EFE