Actualmente, la práctica el ciclismo urbano está tomando mayor relevancia.

Más allá de los beneficios físicos, el ciclismo urbano es un ejercicio que se efectúa sobre las calles de ciudades y comunidades. Esta actividad busca generar una población más saludable a través de una concientización sobre el medio ambiente.

Por medio del Manual del Ciclista Urbano, la Secretaria del Medio Ambiente señala cinco ventajas de este deporte:

1. Rápido y Flexible. Puedes transportarte rápidamente. En distancias menores a 10 km es más eficiente que un automóvil.

2. Accesible. Es una forma democrática de movilidad que te aporta autonomía de manera económica, limpia y eficiente.

3. Divertido. Es una actividad que vigoriza tu cuerpo y activa tus sistemas. La interacción con el medio que te rodea es estimulante.

4. Saludable. Al adoptarlo como estilo de vida fortaleces tu sistema inmune, además de que reduces los niveles de colesterol en la sangre y el estrés.

5. Limpio. La energía la pones tú, y eso evita gastar combustible fósil.

Sin embargo, antes de iniciar con el ciclismo urbano debes tomar en cuenta algunas medidas de seguridad:

1. Circula sin miedo.

2. Usa protección.

3. No circules en sentido contrario.

4. Utiliza siempre el carril de la derecha, que es el designado por las autoridades de tránsito.

5. No uses audífonos, disminuye la atención que le pones al flujo vehicular.

6. No circules en las banquetas.

7. Revisa el estado mecánico de tu bicicleta.

Fuente: Salud 180

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