La investigación publicada en la revista Nature muestra que con el procedimiento, que mezcla material genético de tres donantes adultos, se lograron crear embriones que parecen sanos.

Agregan que los ensayos con monos nacidos con la misma técnica, que ahora tienen tres años de edad, muestran que éstos están en buen estado de salud.

En el Reino Unido se está llevado a cabo actualmente una consulta pública sobre la ética de este procedimiento.

Aunque en este país está permitido utilizar el procedimiento en el laboratorio, los embriones creados no pueden usarse en tratamientos.

Se espera obtener los resultados de la consulta en 2013.

La técnica está diseñada para prevenir las llamadas enfermedades mitocondriales, que provocan serias discapacidades como debilidad muscular, ceguera e insuficiencia cardíaca, y que se transfieren sólo de la madre al niño.

Estas enfermedades son causadas por defectos en la mitocondria, el “motor” de las células.

Fuente: BBC