La es un tipo de muy agresivo que ataca al sistema linfático y se manifiesta inicialmente en los ganglios ubicados en el cuello, el pecho, la axila y la ingle. El 20% de los casos se presentan en adolescentes y adultos jóvenes.

“Este tipo de cáncer se caracteriza por la presencia de una rara forma de tumor celular llamada Reed-Sternberg, que no está presente en otros tipos de linfoma. Para el diagnóstico, normalmente se necesita una biopsia que permite identificar la existencia de la célula y es de suma importancia detectarla a tiempo”, indicó el doctor Juan Navarro, Jefe del Departamento de Hematología del Hospital Edgardo Rebagliati Martins.

Debido a todo ello, a continuación, te nombramos algunos síntomas que podrían indicar la presencia de linfoma de Hodgkin:

1.- Inflamación no dolorosa de los ganglios linfáticos del cuello, las axilas o el área de la ingle y que no desaparece en pocas semanas.

2.- Fiebre sin razón aparente, con temperaturas superiores a los 38 °C.

3.- Pérdida de peso aparente de más del 10%.

4.- Sudoración profusa durante la noche.

5.- Dolor en los ganglios linfáticos que se desencadena con la ingesta de alcohol.

El linfoma de Hodgkin es considerado como una enfermedad huérfana y para que las personas tomen conciencia al respecto y conozcan sobre este mal, cada 15 de septiembre se celebra en todo el mundo el Día Mundial del Linfoma.

Para el tratamiento en primera línea se encuentra la quimioterapia; en segunda está el trasplante autólogo de células madre (TACM), pero todo depende de lo que indique el especialista.