Un es una de las peores molestias que podemos experimentar, y también es un síntoma que se le debe prestar atención porque puede ser una señal de que algo no está marchando bien en la boca.

Esta dolencia suele caracterizarse por un dolor fuerte y palpitante que se incrementa con el paso de las horas. Pero hoy en día es fácil de tratar y descubrir su origen.

Sin embargo, si no estás cerca de un consultorio dental, es necesario conocer algunos remedios caseros que puedes utilizar en caso de emergencia. Aquí te lo decimos.

1. Sal

Tiene un poder antiséptico capaz de aliviar el dolor cuando este está causado por la infección derivada de algún alimento descompuesto entre las muelas. ¿Cómo puedes utilizarla? Solo tienes que diluir una cucharada de sal en medio vaso pequeño de agua y utilizarlo para hacer gárgaras después de cada comida.

2. Ajo

Por tener una acción antibiótica y antiinflamatoria, el ajo es uno de los mejores ingredientes para combatir las infecciones y dolores derivados de estas. ¿Cómo utilizarlo? Tritura un poco de ajo para concentrar su jugo y, a continuación, aplícalo de forma directa en la muela y encía afectada.

3. Clavos de olor

Contiene una sustancia llamada eugenol que funciona como un excelente sedante para calmar el dolor de muela. ¿Cómo utilizarlo? Aplícalo de forma directa en el diente afectado por unos minutos.

4. Agua oxigenada

Solo un poco de agua oxigenada puede servir como tratamiento si el dolor tiene origen en una infección y viene acompañado de mal aliento. ¿Cómo utilizarla? Humedece un pedazo de algodón en esta agua y aplícalo sobre la muela.