Cuando tenemos metas trazadas no paramos de ponerle muchas ganas hasta conseguirlo. Si se nos presenta un obstáculo, hacemos de todo para superarlo. Sin embargo, hay ocasiones en el que nuestro peor enemigo somos nosotros. Pues, cometemos los mismos errores del pesado y seguimos empeñados en repetirlos hasta que al final el destino nos dé la razón, cosa que es difícil de lograr cuando no usamos nuestro raciocinio.

Aquí una lista de las cosas que normalmente hacemos para sabotear nuestros objetivos:

No finalizar las cosas: Seguramente tienes muchas ganas de empezar a hacer algo y cuando ya estás a mitad de camino o casi de terminarlo, decides tirar la toalla. Este tipo de cosas solo traerá problemas o una mala imagen en diferentes aspectos de tu vida.

Hacer las cosas a último minuto: No hay anda peor que posponer las cosas a último minuto. La verdad de todo esto es que solo tienes miedo de finalizarlo y prefieres poner como excusa que no tuviste tiempo.

Perfeccionismo: Si eres una persona perfeccionista, entonces más vas a lograr estresarte y dejar las cosas inconclusas porque nunca te sentirás satisfecha con el resultado final.

Excusas: Las excusas siempre van a sobrar. Las más conocidas son “Soy demasiado joven…”, “Soy demasiado mayor”, “No me siento preparado…”. Es mejor que dejes las excusas de lado y comiences a tomar las riendas de tu vida ahora mismo.

Toma en cuenta estas acciones y evítalas a la hora de conseguir tus objetivos.