Los habitantes del famoso barrio rojo de la ciudad de Hamburgo, en Alemania, han encontrado una ingeniosa forma de evitar que las personas ebrias orinen en las paredes de sus casas. Ellos, son conscientes que viven en una ciudad muy concurrida, pero eso no significan que quienes la visiten no la cuiden ni la respeten.

TAMBIÉN LEE: Miran la reacción de 3 mujeres al probar la marihuana

Por eso, los habitantes de St. Pauli, no están contentos con la suciedad y malos hábitos de algunos que van a pasar un buen rato a su ciudad. Viven en una de las zonas con más vida nocturna del mundo, la cual suele ser visitada por más de 20 millones de personas al año, y aunque no se quejan por la música y el desorden, sí lo hacen por la mala costumbre que muchos de ellos han demostrado poseer.

TE PUEDE INTERESAR: 2 esqueletos nos dicen: El amor no tiene género

Es así que ellos han creado su propio método para que estas personas tomen conciencia sobre lo que ocasionan a la ciudad.