El ecuatoriano Eduardo Quintana, autodefinido como “fotero”, inaugurará en los primeros días de mayo la muestra Retratos e identidades, captadas durante más de tres décadas dedicado a la fotografía.

Esta exhibición, en el Icpna del Cercado de Lima, forma parte de las actividades programadas como parte de la primera Bienal de Fotografía de Lima.

El artista confiesa que esta selección de instantáneas se nutren de cuatro aspectos esenciales: la nostalgia, el efecto dramático de la luz, involucrarse con personajes y lugares y, finalmente, ejercer lo que él llama el oficio de “fotero” o fotógrafo.

La exposición está conformada por una colección de cerca de 50 fotos tomadas desde 1979 hasta 2010, en las que prevalecen imágenes de su época analógica.

Puntualiza que él mismo ha realizado la curaduría de la muestra, buscando “configurar esta exposición a manera de una versión de retrospectiva que incluye fotografías de diversas series”. En esta selección han primado las instantáneas en las que se retrata personajes de las zonas populares de su país.

Las fotos fueron trabajadas digitalmente dando, en palabras del ecuatoriano, sorprendentes resultados, “pero que aún no desplazan el afecto y el recuerdo de los olores del cuarto oscuro donde me sentía más artífice, más panadero, más alfarero, más jardinero, más ‘fotero’”.