En días previos a y , los hogares empiezan a ser decorados con luces, árbol y demás artículos que requieren de una conexión a la corriente. Las no toman conciencia del peligro que representa para ellos recibir una descarga eléctrica al morder o jugar con alguno de ellos.

El porcentaje de sobrevivencia para una a una descarga es muy baja, en especial perritos o gatitos pequeños. Esto es debido a que puede darse un daño grave en la piel y los tejidos (por las quemaduras) y también puede repercutir en graves complicaciones como edema pulmonar (líquido en los pulmones).

En el caso de que se dé una descarga eléctrica y tu mascota salga perjudicada, te brindamos una serie de recomendaciones para que lo atiendas de inmediato, sin olvidar que es vital que lo revise un veterinario.

1. Desconecta los cables eléctricos o apaga la electricidad. Si esto no es posible, utiliza una escoba de madera seca u otro objeto no conductor para alejar a tu mascota de la fuente de electricidad.

2. Comprueba si tiene respiración y pulso. Si conoces la técnica de respiración boca a boca, llévala a cabo si es necesario.

3. Si tu mascota está respirando, fíjate si tiene quemaduras en su boca y cuerpo (con cuidado) y aplica compresas frías en las quemaduras.

4. Cubre a tu mascota con una manta para evitar la pérdida de calor.

5. Busca atención veterinaria inmediata o tan pronto sea posible.

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