El Gobierno de Portugal pondrá en funcionamiento su primer “robot funcionario”, de nombre Lola, que comenzará a trabajar, con la misión de agilizar los trámites burocráticos, a principios de 2019 en una oficina de atención al ciudadano de Oporto.

La iniciativa se enmarca dentro del programa público “Simplex”, que sirve para facilitar las gestiones burocráticas ordinarias entre ciudadanos, empresas y el Gobierno.

La secretaria de Estado de Modernización Administrativa, Graça Fonseca, ya avanzó que el robot será el encargado de recibir al cliente, en este caso, en la Oficina del Ciudadano de Oporto.

Quienes lo deseen, tendrán que contarle al robot qué tipo de trámite quieren hacer y Lola les llevará al puesto más indicado en el que serán atendidos por un funcionario.

Incluso, según Fonseca, si el trámite se puede agilizar por vía telemática, el propio robot será el encargado de ayudar al solicitante a realizar la tarea “online”, siempre que sea posible.

El programa Simplex fue creado hace once años por el Gobierno de Portugal para simplificar los trámites y entre sus objetivos a corto plazo está el de reducir las facturas en papel y convertirlas en electrónicas.

Desde su creación se implantaron 1.200 medidas para simplificar la vida de los ciudadanos y de las empresas, y para modernizar los servicios públicos.

Esto se ha traducido en tiempos de espera reducidos, mayor cercanía al ciudadano y menos burocracia.