Intel y otras compañías de tecnología han sido informadas acerca de una nueva investigación de seguridad que describe métodos de análisis de software, que al ser utilizados para fines maliciosos, tienen el potencial de recopilar datos confidenciales de dispositivos informáticos que funcionan según lo diseñado. Intel confía en que éstos no tienen el potencial de corromper, modificar o eliminar datos.

Los informes recientes acerca de que esto ha sido causado por un “bug” o “falla” y que son únicos de los productos de Intel, son incorrectos. Con base en el análisis al día de hoy, muchos tipos de dispositivos informáticos, cuyos procesadores y sistemas operativos provienen de diferentes proveedores, son susceptibles a este problema.

Intel asegura que “está comprometido con la seguridad de productos y clientes y está trabajando muy de cerca con otras compañías de tecnología como AMD, ARM Holdings y varios proveedores de sistemas operativos, para desarrollar una propuesta de parte de toda la industria, la cual pueda resolver este asunto de manera rápida y constructiva”.

Asimismo, la emrpesa indicó que ha comenzado a proporcionar actualizaciones de software y firmware para mitigar esta situación. A diferencia de algunos informes, cualquier impacto en el rendimiento depende de la carga de trabajo y, para el usuario promedio, no debería ser significativo y se mitigará con el tiempo.

“Intel está comprometido con las mejores prácticas de la industria en cuanto a la divulgación responsable de cualquier posible asunto de seguridad, razón por la cual Intel y otros proveedores divulgarían la información la próxima semana cuando hubiera más actualizaciones de software y firmware disponibles. Sin embargo, Intel realiza esta declaración el día de hoy debido a reportes imprecisos de parte de los medios”, manifestó..